Un nuevo libro publicado sostiene que el famoso asesino Jack el Destripador podría haber sido, en verdad, una mujer.
En el texto, titulado "Jack el Destripador: la mano de una mujer", la autora John Morris le pone nombre de dama al misterioso destripador londinense: Elizabeth Williams, esposa de un médico de nombre John Williams.
El ginecólogo John Williams figura en una larga lista de sospechosos mencionados a lo largo de los años como supuestos autores de los horrendos crímenes, un misterio que ha dado pie a toda clase de teorías por más de cien años, algunas más plausibles que las otras.
Pero para Morris, una abogada retirada del sur de Gales, en el Reino Unido, son muchas las indicaciones de que Jack vestía faldas y no estaba interesada en desahogar frustraciones sexuales, sino en ejecutar una venganza contra las de su género.
"Numerosas pistas, que parecen inconexas en los distintos crímenes, pueden significar poco, pero cuando se ponen juntas sugieren que una mujer podría haber estado detrás de los crímenes", le dijo Morris a la prensa local.
En su opinión, la evidencia ha sido ignorada, porque siempre se ha creído que se trataba de un hombre.
Infertilidad
Según la autora, un elemento crucial es que Jack le extrajo el útero a tres de sus víctimas.
Williams no podía tener hijos, y supuestamente estaba atrapada en un matrimonio infeliz.
Para Morris, esto podría haberla llevado a cruzar el umbral de la locura, y a emprenderla en contra de mujeres que, a diferencia de ella, sí podían concebir. Un elemento en favor de esta hipótesis, sostiene, es que las prostitutas que murieron a manos de Jack nunca fueron agredidas sexualmente.
Por otro lado, pedazos de una capa, una falta y un sombrero de mujer fueron encontrados en la chimenea de la última mujer asesinada, Mary Jean Kelly. Pero no le pertenecían a la víctima.
Además se cree que Kelly había tenido una relación con el doctor John Williams. Lo cual explicaría por qué el Destripador dio por terminada su criminal carrera con la muerte de Mary Jean.